Las lluvias cambiaron el panorama productivo, especialmente en la región núcleo
Para la soja, cuya siembra recién comienza, estas precipitaciones llegan en un momento ideal, asegurando un mejor arranque. También fueron beneficiosas para el maíz y el girasol.
En un contexto clave en la definición de rendimientos de los cultivos de fina y en medio de la ventana de siembra de los cultivos de gruesa, las recientes precipitaciones han mejorado las condiciones en zonas que hasta hace una semana sufrían una marcada falta de humedad, informó la Bolsa de Cereales de Buenos Aires en su blog.
"Hace dos semanas, en el Panorama Agrícola Semanal (PAS), se advirtió que el avance de siembra de maíz y girasol estaba limitado por la falta de humedad. La zona núcleo mostraba niveles de humedad subóptimos para el maíz, lo que retrasó su avance y comprometía alcanzar el área proyectada", indica la BCBA.
De manera similar, el girasol presentaba retrasos en la siembra por la escasez de humedad en el centro y norte del área agrícola, generando que a nivel país se registre un avance de siembra del 10,3%, el más bajo de los últimos 25 años.
En cuanto al trigo, la condición regular a mala empeoraba en casi todas las regiones, salvo en el sur del país, donde las condiciones hídricas fueron adecuadas al momento de la siembra y se han mantenido estables durante el ciclo de crecimiento.
"Sin embargo, las recientes lluvias que se concentraron principalmente en la región núcleo del país y en menor medida en el norte, permitirían avanzar con las siembras de girasol, maíz temprano y soja de primera. En el centro-norte del área agrícola, algunos productores podrían sumar hectáreas de girasol, y en el NEA, donde la siembra comenzó en agosto, mejorarían las condiciones. Por otro lado, respecto a los cultivos de invierno, habría una mejora en sus condiciones en aquellas regiones que se encontraban comprometidas por la escasez de lluvias", puntualiza el informe.