Desarrollan una formulación líquida para controlar el dengue
Se trata de un biolarvicida, que se fumiga sobre los cuerpos de agua donde crece la larva del mosquito. Se informaron 32 muertes en nuestro país.
Hasta el momento se reportaron 32 muertes por dengue en Argentina, lo que representa una cifra récord. El Ministerio de Salud actualizó ayer las cifras e informó 28.235 infectados de dengue, siendo Salta y Tucumán las provincias con más víctimas fatales.
La situación sanitaria reportada en Salta por el Ministerio de Salud Pública de la provincia indica el incremento de enfermedades virales transmitidas por la picadura del mosquito del género Aedes, tales como Dengue, Chikungunya, Zika, y fiebre amarilla.
A raíz de esta problemática, se constituyó el Convenio de Cooperación Técnica entre el INTA Salta, el Ministerio de Salud provincial y la Universidad Nacional de Salta (UNSa), cuyo objetivo es "la producción asociada y distribución intraprovincial de biocontroladores, para ser utilizados exclusivamente en el control de insectos vectores de esas enfermedades", señaló Guadalupe Mercado Cárdenas, investigadora del INTA Salta.
Los antecedentes
Hace algún tiempo, el IMyZA produjo un biolarvicida destinado al control del mosquito transmisor del dengue.
Diego Sauka, responsable del Laboratorio de Insumos Bacterianos e investigador del INTA, había asegurado que ya se podía "avanzar en la transferencia para el desarrollo con éxito de una formulación líquida".
De acuerdo con Mercado Cárdenas, "contar con una cepa de efectividad probada le permitió al personal científico-técnico del Convenio avanzar rápidamente en los objetivos planteados".
En esta línea, especificó: "En los primeros años se logró la optimización de protocolo de producción de biomasa (PB) a través de un medio de cultivo con materia prima económica y fácilmente disponible".
Cómo se fumiga
El biolarvicida se fumiga sobre los cuerpos de agua donde crece la larva del mosquito.
"La larva filtra el agua para alimentarse e ingiere las proteínas insecticidas que produce la bacteria y que actúan a nivel del intestino del insecto: se produce un daño en las células, la larva no puede seguir alimentándose y muere a las pocas horas", explicó Sauka.
Asimismo, el avance y las gestiones realizadas en el marco del convenio, permitieron la instalación del Laboratorio de investigación y producción de Biocontroladores en un edificio del Ministerio de Salud Pública.
Se trabajó en el ajuste de dosis en pozos ciegos, logrando una efectividad de control del 97 % de las larvas. Asimismo, se capacitó a los agentes socioambientales (ASAs) de los municipios de alto riesgo de transmisión del virus para la aplicación del producto.
Es que, de acuerdo con la investigadora, "en Salta, como en el resto del país, para el control de vectores de enfermedades humanas se emplean insecticidas de origen químico, pero está probado por varios estudios que en la provincia existe un alto grado de resistencia a las dosis normales que se emplean de esos productos".
Se denomina control biológico a la utilización de organismos vivos o de sus productos para evitar o reducir las pérdidas o daños causados por los organismos nocivos. En este sentido, Mercado Cárdenas ponderó los beneficios de esta estrategia por implicar un costo menor al de los métodos convencionales y aportar a la calidad de vida humana y a la sostenibilidad del ambiente.