Bolivia anuló decretos pro transgénicos
El gobierno aprobó un decreto de protección de la fauna silvestre y otro que elimina tres normas que establecieron mecanismos expeditos para la introducción de nuevas variedades de semillas genéticamente modificadas para cultivos masivos.
El Gobierno de Bolivia anunció la anulación de unos decretos de apertura plena a los cultivos transgénicos, aprobados por la pasada administración transitoria de Jeanine Áñez, y la suspensión temporal de las exportaciones de carne para proteger el mercado interno.
"Quiero reiterar el compromiso de nuestro gobierno para luchar contra el cambio climático y proteger los derechos de la Madre Tierra", dijo el presidente Luis Arce al revelar las medidas, informó la Agencia Sputnik.
Arce dijo que el Gobierno aprobó un decreto de protección de la fauna silvestre y otro que elimina tres normas de igual rango emitidas por Áñez, que establecieron mecanismos expeditos para la introducción de nuevas variedades de semillas genéticamente modificadas para cultivos masivos.
"Eliminamos el abuso del gobierno de facto que introdujo sin sonrojarse toda la cadena de transgénicos a nuestro país", afirmó.
Paralelamente, el ministro de Desarrollo Rural, Remmy Gonzales, confirmó la suspensión temporal de las exportaciones de carne, un negocio de gran crecimiento en los dos últimos años, tras protestas de comercializadores internos que denunciaron alzas injustificadas de los precios mayoristas.
Sobre las exportaciones de carne, el ministro Gonzales dijo a reporteros que la suspensión temporal de las ventas externas apuntaba a garantizar la estabilidad del mercado interno y respondía a la protesta de comercializadores por el incremento en los precios mayoristas.
"Cuando se confirme que existe excedente de producción de cárnicos y que el mercado interno está garantizado, se permitirá su exportación", explicó.
Bolivia era un pequeño exportador de carne vacuna procesada a Perú, Ecuador y eventualmente Chile hasta 2019, cuando se benefició con una apertura del mercado de China, que se convirtió rápidamente en el principal cliente.
Las ventas de carne a China estaban proyectadas para superar este año las 20.000 toneladas de cortes seleccionados, con un valor estimado en unos 80 millones de dólares, según informes oficiales.
Los productores ganaderos de las regiones tropicales bolivianas anunciaron a principios de este año planes para iniciar a corto plazo la exportación de carne vacuna a Rusia.