El campo retuvo ventas y profundizó el rojo comercial, que en junio fue de u$s748 M

26-07-17  La paulatina apertura comercial y el tipo de cambio atrasado dieron como resultado un saldo negativo de 2.613 millones de dólares en la balanza comercial para el primer semestre del año, lo que marca el mayor rojo para el período enero-junio desde el año 1994. Los datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) difundidos ayer revelaron que en junio las importaciones aumentaron 15,4 por ciento de manera interanual y las exportaciones cayeron 2,6 por ciento, lo que arrojó un déficit de 748 millones de dólares en el mes, otro número que se destaca frente al superávit de 174 millones que se registró en junio de 2016.

El Indec precisó que la baja de 2,6 por ciento de las exportaciones en junio es producto de caídas de 0,7 por ciento en los precios y 1,9 por ciento en las cantidades. Por otro lado, la suba de 15,4 por ciento de las importaciones se explica por aumentos de 5,8 por ciento en los precios y 9 por ciento en las cantidades.

Dentro de las exportaciones, más allá de la caída de 44 por ciento en energía, se destaca la menor venta al exterior de productos del sector agropecuario, con una baja de 8,8% en Manufacturas de Origen Agropecuario (MOA) y de 3,6 por ciento en productos primarios.

"Me llamó la atención lo que están cayendo la exportación de productos primarios y MOA, al principio de año era lógico porque se comparaba con un año donde se liquidó mucho después de la salida del cepo, pero ahora, con la cosecha más grande, no deberían estar cayendo", señaló Fausto Spotorno, director del Centro de Estudios Económicos de OJF y agregó: "Hubo un paro fuerte en el puerto que pudo haber impactado en las exportaciones vinculadas a la soja".

Otra lectura que hacen en el mercado es que es el refl ejo de la retención de granos la cosecha anterior (2015/2016), que rondaría los 5 millones de toneladas. En esa línea se mostró la consultora Abeceb, que en su informe comentó que "la profundización de la caída en el segundo trimestre responde a factores coyunturales, que llevan a los productores a demorar la liquidación de su producción a la espera de mejores rendimientos; en particular, al aumento esperado de los precios, se sumaron las expectativas de depreciación del peso que fi nalmente se concretó en las últimas semanas".

Para Gabriel Caamaño, economista de Consultora Ledesma, la base de comparación es un factor clave para explicar esta baja. "El primer semestre de 2016 fue muy bueno para el sector agropecuario", destacó.

En tanto, el único segmento en donde aumentaron las exportaciones fueron las Manufacturas de Origen Industrial (MOI), que aumentaron 12,4 por ciento, por un alza de 13,8 por ciento en las cantidades vendidas, mientras que los precios cayeron 1,2 por ciento.

En este caso también el punto de comparación infl uye ya que la suba es respecto a un período no tan bueno para la industria.

Compras al mundo Por otro lado, respecto a las importaciones, se registraron aumentos en todos los rubros, con excepción de combustibles y lubricantes, en donde hubo una caída de 5 por ciento. Así,s e destacaron subas de 32,3 por ciento en la importación de piezas y accesorios para bienes de capital, de 25,6 por ciento para vehículos, de 18,1 por ciento para bienes intermedios, 13,2 por ciento para bienes de consumo y 10 por ciento para bienes de capital.

"La mejora en las importaciones de bienes de capital es en parte por el crecimiento de la actividad económica y en parte porque el dólar estaba barato", dijo Spotorno, que cree que "eso va a seguir pasando" en el mediano plazo.

Una de las conclusiones a la que llega la consultora Abeceb es que "las exportaciones siguen estancadas ante la demora del agro" mientras que las importaciones "vuelven a crecer con fuerza en junio, en línea con la mayor dinámica de la actividad económica".

Respecto al crecimiento en las importaciones de los bienes de consumo, Caamaño señala que es lógico ese alza, ya que "venimos de muchos años en donde las restricciones afectaban sobre todo a ese tipo de bienes. También es lógico por el nivel de atraso y de los altos costos locales".

Sin embargo, el economista destaca que no es que las importaciones estén en niveles históricamente altos, ni en valor ni en cantidad.

"Están recuperando terreno perdido; no es un nivel de importaciones alarmante", agregó. Al analizar la información por origen de los productos el Indec reveló que el défi cit comercial con Brasil fue de 699 millones de dólares con Brasil, mientras que con China sumó u$s385 millones y u$s269 millones con Estados Unidos.

"Brasil es una economía muy estancada y tienen que salir para algún lado los productos que elabora.

Lo que no puede colocar internamente lo trata de colocar afuera", explica Spotorno.