La campaña 2024/25 enfrenta importantes desafíos productivos y económicos
En un contexto global marcado por cosechas récord en Brasil y buenos niveles de producción en Estados Unidos, que han presionado los precios internacionales de la soja y el maíz a mínimos históricos.
Desde una perspectiva económica, se estima que el sector agrícola generaría USD 30.568 millones en exportaciones en la campaña 2024/25, apenas USD 292 millones más que el ciclo previo, cuya cifra estimada es de USD 30.276 millones, informó la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
De este total proyectado para la campaña 2023/24, aún restarían exportarse USD 7.782 millones.
En cuanto a los cultivos de fina, trigo y cebada generarían en conjunto aproximadamente USD 3.590 millones en el ciclo 24/25, marcando un incremento de USD 440 millones respecto al ciclo anterior.
La cosecha de trigo muestra un avance del 38,7%, con un adelanto interanual de 2,7 p.p., mientras que la cebada registra un progreso del 4,7%.
En el frente climático, aunque el ciclo 2024/25 comenzó bajo la influencia de La Niña, que anticipaba condiciones climáticas desfavorables, las lluvias registradas al inicio de la siembra no solo mejoraron el panorama inicial, sino que también generaron una buena condición para los cultivos ya implantados y están favoreciendo las labores de siembra en las áreas restantes.
La soja ganaría protagonismo con un aumento del área sembrada de 17,3 MHa a 18,6 MHa, capitalizando la caída del maíz, que perdería alrededor de 1,6 MHa (-20% i.c.) tras los daños causados por la chicharrita en la campaña anterior. Sin embargo, las limitaciones en la inversión tecnológica, derivadas de los bajos precios internacionales y la persistente carga impositiva, restringen el alcance de los rindes potenciales. Como resultado, se espera que la producción de soja apenas crezca de 50,2 Mtn a 50,8 Mtn, lejos del récord de 60,8 Mtn alcanzado en la campaña 2014/15.
Bajo este escenario, se proyecta una producción total de 128,9 millones de toneladas (Mtn) para la campaña 2024/25, apenas un 2% por encima del ciclo anterior, pero un 8% por debajo del récord de 140 Mtn logrado en el ciclo 2018/19. Desde entonces, la producción se ha mantenido en un rango entre 126 Mtn y 131 Mtn, exceptuando la campaña 2022/23 marcada por la sequía, donde la producción se ubicó en 83,6 Mtn.
La campaña 2024/25 enfrenta importantes retos productivos y económicos, en un contexto internacional marcado por expectativas de cosechas récord.
Esto se reflejó en el mercado local, donde los precios a cosecha de soja y maíz registraron niveles particularmente bajos para la etapa de presiembra, con caídas del 15% y 7% respecto al año anterior, ubicándose además por debajo del promedio de las últimas cinco campañas.
La caída en los precios, junto con una reducción de los costos de los insumos que no fue proporcional, afectó los márgenes brutos, con un deterioro del 26% a nivel nacional en comparación con el ciclo anterior. Al incorporar los costos de alquiler, la situación se torna aún más crítica, limitando la rentabilidad de los productores.