Un tren que pasa sólo una vez

El tren de distribución puede definir el éxito o el fracaso de una siembra. Una mala regulación o puesta a punto tirará por la borda toda buena intención de sembrar con cuidado y prolijidad.

El trabajo de la cuchilla labrasurcos resulta determinante para el paso, luego, del surcador. Elegir aquella que mejor se comporte en el suelo propio será clave. La cuchilla “turbo” es la clásica y de muy buen desempeño general pero no siempre será la mejor opción. En algunos casos se produce mucho revoleo de suelo fuera del surco. Recuerde que la profundidad de labor de este elemento no debe superar un cuarto de su diámetro, por ejemplo para una cuchilla de 18 pulgadas, la profundidad máxima será entre 4 y 5 cm. Esto es debido a su capacidad de corte del rastrojo en superficie.

Emergencia rápida

Otra situación a tener en cuenta va a ser el contenido de humedad del suelo al momento de la siembra. Por ahora, las lluvias no son las deseadas en todos lados. Si la situación continúa habrá que regular la máquina de modo de sembrar lo más profundo que el cultivo permita, es decir alrededor de los 4 ó 5 cm.

Respecto a esto, y en aquellos lotes con gran cantidad de rastrojo en superficie puede jugar un papel importante la colocación de barredores de rastrojo en el tren de distribución. Un buen desempeño de este elemento permite que las ruedas limitadoras de profundidad tomen como referencia el suelo limpio y no el rastrojo. Si la rueda mencionada hiciera esto último la profundidad efectiva será menor. Según el contenido hídrico del suelo, esto puede ser la diferencia entre una buena disponibilidad de agua para la emergencia o no. Al mismo tiempo, en zonas de bajas temperaturas durante la implantación, el retiro de residuos permite aumentar la temperatura en la hilera y acortar el tiempo a la emergencia de las plántulas.

Pero no se tome a la ligera el uso de estos elementos. La regulación de barredores de rastrojo debe hacerse con tiempo y dedicación para lograr que limpien todos los restos vegetales y, al mismo tiempo no retiren tierra de la superficie del terreno. El montaje con paralelogramos deformables permite que éstos también copien adecuadamente las irregularidades de la superficie del suelo. Su desempeño será mejor cuando sean traccionados y montados sobre paralelogramos, en lugar de ser empujados por el chasis de la máquina.

Profundidad efectiva

Las ruedas limitadoras de profundidad adosadas al surcador son, mayormente, la mejor opción, ya que la descarga de semillas se ubica en el mismo punto en que estas ruedas toman el nivel de suelo como referencia. Cuanto mayor diámetro tengan las limitadoras, mejor será el copiado de la superficie del suelo por la mayor superficie de contacto entre éstas y el suelo. Es preferible mantener superficie de apoyo por mayor diámetro y no por el ancho de pisada. Esto debido a que será más fácil tener limpia la zona de circulación de las ruedas limitadoras de profundidad cuando el ancho de pisada es menor. Dicho de otro modo es más difícil barrer un mayor ancho de banda.

Bien tapadas

Por ser dicotiledónea, las semillas de soja, sacan sus cotiledones al exterior en el momento de la emergencia. Por esto, se debe tener mucho cuidado con la compactación del suelo sobre la semilla, el apretado para lograr buen contacto con el suelo sólo debe ser realizado en forma lateral.

Por encima de la semilla, previamente apretada sobre el fondo de surco, se requiere solamente tierra suelta. El correcto tapado de la simiente será aquel que arrime tierra, ya sea mediante desmoronamiento, aporte o una combinación de ambos métodos, dejando un pequeño lomo de tierra en la hilera.

Aquí es muy importante no incorporar residuos vegetales porque pueden generar cámaras de aire que favorecen el desarrollo de hongos o sirven de cobijo para pequeños insectos, crustáceos y moluscos, los cuales pueden complicar al extremo la implantación al reducir notablemente el número de plántulas obtenidas, o incluso hacerla fracasar por completo.

Para esta tarea resultan de utilidad las ruedas biseladas trabajando con cierto ángulo con la vertical. Para un beneficio adicional, en el caso de suelos más duros, pueden utilizarse los discos dentados adosados a estas ruedas para un mayor desmoronamiento de las paredes del surco. Por el contrario en suelos arenosos, sueltos puede lograrse un buen tapado sólo con  una rueda cubridora en ángulo y sin suplemento dentado.

Tacos

En función de la humedad al momento de la última cosecha el paso de la máquina puede haber dejado marcados los tacos de los neumáticos en la superficie del suelo, lo cual suma un inconveniente adicional. Aun cuando la deformación de la superficie (huella) no sea muy marcada, sí pueden encontrarse los tacos bien marcados.

Nuevamente lograr una siembra adecuada en estos sitios es una tarea realmente difícil. Aquí ni siquiera el paralelogramo del tren de distribución es capaz de copiar estas irregularidades. Las ruedas limitadoras de profundidad tomarán como referencia las crestas de las marcas.

Todo dependerá de la profundidad del dibujo producido por los neumáticos en el suelo; y la importancia de este efecto en el lote estará determinada por el ancho de la plataforma utilizada, ya que a mayor ancho menor cantidad de pasadas.