Apicultores se asocian para innovar
En el Valle de Conlara un grupo de productores descubrió que la clave para crecer era unirse
La apicultura es reconocida como una excelente alternativa para pequeños emprendedores debido a que ofrece la posibilidad de asociarse para crecer. De hecho, en el Valle de Conlara –noreste de San Luis– 11 agricultores familiares comprendieron que la organización era la oportunidad para alcanzar nuevos mercados. Así, nucleados en el grupo apícola Los Chañares producen diferentes tipos de miel libre de agroquímicos, subproductos de la colmena y ofrecen servicios. Acompañados por el INTA, serán parte de la feria de las regiones Buenos Aires Celebra.
De acuerdo con Rita Bonelli, especialista en desarrollo rural del INTA Quines –San Luis–, "es la primera vez que productores se unen y conforman un grupo que integra a los apicultores de todo el corredor del Conlara, que incluye las localidades de Merlo, Cerro de Oro, Naschel, Santa Rosa del Conlara, Concarán, Punta del Agua, Carpintería y Tilisarao".
Con la premisa de agregar valor a su producción y aumentar la rentabilidad, el grupo apícola Los Chañares comenzó a trabajar en 2015. "El desafío era agregarle valor en origen a la producción primaria", destacó Bonelli y explicó: "Entendieron que la clave estaba en juntarse para hacer gestiones porque de lo contrario no llegaban a ningún lado".
Como resultado de la ubicación geográfica privilegiada, los apicultores de Los Chañares producen miel libre de agroquímicos, hidromiel, arropes y mostaza a la miel. Además, ofrecen servicios relacionados a la actividad como polinización, producción de núcleos y reinas.
Gastón Arribas es apicultor y, además, se desempeña como promotor asesor del grupo. "Entre los 11 productores sumamos 1.400 colmenas y nos enfocamos en la recolección y fraccionamiento de la miel del monte nativo", señaló.
Con una producción que ronda los 25 kilogramos por colmena, Los Chañares comercializa mieles y los derivados de la colmena. "Para nosotros es muy importante conocer el monte nativo; de esta manera sabemos qué especies florecen más temprano, cuáles son más tardías y podemos planificar el escalonamiento de la producción", expresó Arribas.
"A principio de la temporada –julio y agosto–, florece un arbusto muy melífero, conocido como molle, que aporta miel, néctar y polen", afirmó Arribas y aclaró: "Esta primera floración sirve más que nada para que la colmena se prepare para el inicio de la temporada".
Luego, a mediados de agosto, llega el tiempo del algarrobo. "Se trata de una planta que es una gran fuente de néctar; de hecho, para nosotros representa el 50 % del total de la temporada", confesó Arribas quien aseguró: "Gracias a esto tenemos miel monofloral de algarrobo, un producto muy buscado porque es dulce, de color muy claro y de consistencia más bien sólida, que se cristaliza a las 72 horas de cosechada".
Además de los diferentes tipos de miel, el grupo Los Chañares produce y comercializa hidromiel. "Es un producto que casi no se conoce", indicó Arribas y advirtió: "Pero cuando lo prueban me la sacan de las manos".
La hidromiel es una bebida que posee una concentración alcohólica que varía del 10 % al 15 % y se obtiene a partir de la fermentación de la mezcla de agua y miel. "La flor del monte nativo le da una característica particular a nuestra hidromiel", afirmó Arribas.
Así, con el asesoramiento y acompañamiento del INTA comenzó un proceso de capacitación que hoy se concreta con la participación en ferias nacionales como Caminos y Sabores y Buenos Aires Celebra.
"Para nosotros Buenos Aires Celebra es una oportunidad para mostrar lo que hacemos", dijo Arribas quien resumió: "Tenemos buenas expectativas por eso vamos a exponer para la venta todos nuestros productos: Mieles multiflorales y monoflorales, propóleos, hidromiel, arropes y mostaza a la miel".
Para generar oportunidades comerciales
El grupo Los Chañares participará en la feria Buenos Aires Celebra que se realiza el 17 y 18 de septiembre en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Allí, emprendedores familiares de las diversas regiones del país tienen la oportunidad de mostrar la elaboración artesanal de sus alimentos.
De acuerdo con la técnica del INTA, "la participación en ferias y exposiciones como BA Celebra les permite fortalecerse como grupo y compartir su trabajo, lo que mejora la competitividad de sus producciones al generar nuevas oportunidades comerciales y promover la inserción de sus productos en circuitos de comercialización más amplios".
Por esto, desde el INTA, "buscamos que los emprendedores familiares tengan acceso a nuevos mercados para que puedan difundir sus productos y contribuir al conocimiento sobre los procesos de producción característicos de cada territorio", enfatizó Bonelli.